LAW FIRM, Estudio de Abogados WhatsApp 964970657

viernes, 12 de octubre de 2012

UN BLINDAJE PARA HOMBRES DE NEGOCIOS CONTRA LOS "CABEZAZOS"


UN BLINDAJE PARA HOMBRES DE NEGOCIOS CONTRA LOS "CABEZAZOS"

JESUS JIMENEZ LABAN

En los negocios internacionales hay que tener rayos infrarrojos. Si no quiere salir del negocio y, más bien, busca durar 100 años, tiene que aprender a mirar a través del muro. 
Ver donde otros no ven.

Y es que el comercio exterior requiere de información de avanzada para no meter la pata. Y al mismo tiempo sicología para detectar a tiempo a los sinverguenzas. Es decir, los embaucadores que se hacen pasar como importadores. 

A veces, en los negocios uno necesita tener guardaespaldas para que le avisen por dónde viene el disparo y agacharse a tiempo. Encontré a Antero Esquivel un alto ejecutivo de un banco en una sala de conferencias de Promperu, la promotora de las exportación del país, que en dos horas contó toda su experiencia bancaria de 25 añs para ayudar a los exportadores a hacer negocios sin perder dinero o quedar calato. 

Para los negocios -recomienda este experto en banca- hay que ser frío, cerebral y no emocional. Cuando uno se deja emocionar, es que los sinverguenzas se aprovechan del momento. 

Por ejemplo, ningún empresario zorro creería en lo que dice una página web. Muchos se electrizan cuando navegan por un site y creen que han encontrado el tesoro de Alibabá. Pero eso puede ser simplemente una máscara, detras de la cual hay una estafa. De manera, que ya lo sabe. No se emocione con una página web que puede construirse en cualquier lugar y con mucha perfección.

Por ahí, por ese simple detalle, muchos caen como mansas palomas. Por eso, hay que aprender a negociar y no dejarse sorprender. 

Sin embargo, hay hombres de negocios muy confiados. Sin conocer al importador, operan con "cuenta abierta", es decir, primero envían la mercadería y luego esperan el pago. Y todavía se dan el lujo de mostrar su abanico de opciones: cheques, transferencia, giros, ordenes de pago, internet.

Puede ser terrible cuando el comprador, que se hizo pasar como importador, nunca paga la cuenta. El importador se quedó con la mercadería y el exportador endeudado hasta el cuello y lo que es peor si tener opción a cobro porque no tiene como probar la deuda. 

Como se sabe, hay personas que cierran contratos verbales, pero estos no tienen evidencia, las más de las veces. Los jueces tienen dificultades para emitir un fallo a partir de correos electronicos o audios grabados. 

"Eso es como abrise la barriga con un bisturí", dicen los entendidos en estos negocios de precisión.

Esto ha pasado -no todas, pero si algunas veces- cuando se trabaja con transferencias. 

Por eso me parece bueno que un experto en banca nos alerte y nos cuente cuál puede ser la salida para esquivar estas "mañoserías". Y quisiera compartir con usted la solución. Existen tres empresas internacionales que rastrean a la gente, es decir, dan información comercial. Son una especie de clasificadores, a saber: COFACE, DUN&BRADSTREET y INFORME DEL PERU.

Con estas empresas se puede tener casi certeza ¿quién es el comprador?, ¿es buen pagador?, ¿le gusta "tirar cabeza"? Porque a decir verdad, los inventores del cabezazo no son los peruanos -como dicen las malas lenguas- sino están en otras partes y todos agazapados: visten bien, manejan los negocios a la perfección, tienen refinadas maneras y viven como "play boy".

Lo que he querido con este aporte es no tener caras largas por razones de quiebra, que no falten el dinero para la familia por un mal paso y que los hombres de negocios sean cada vez menos confiados, especialmente en esta crisis internacional. ¿Estamos claros?¡Que esté bien, amigo! Saludos cordiales. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario